Hace unos días a raíz de un comentario en este rincón, un lector anónimo manifestaba que no había color entre el carbonero y papá noel, que aquel era el preferido de los niños, yo mantenía lo contrario y le invité a pasear por el pueblo y contar los escaladores de ventanas de uno y otro, para salir de dudas. Para entonces yo ya tenía contados varios muñecos y me salía que ganaba por diferencia papá noel.
Hoy el diario Qué recoge un suelto referido a Bilbao en el que da cuenta del mismo resultado.
¿Se imaginan Vds. Lo que sería si el presupuesto que dedican nuestras instituciones públicas a campañas para hacer simpático al carbonero lo dedicaran al gordinflón rojo?
Nuestros políticos, como siempre, al revés de la gente común. Los niños del mundo con unas tradiciones y unas ilusiones comunes y los nacionalistas inventando historias para ser diferentes.
País
No hay comentarios:
Publicar un comentario