viernes, julio 30, 2010

En la intimidad

Aunque con retraso, traigo un artículo de Eduardo Uriarte con el que estoy de acuerdo en cada coma.

En Bilbao, donde no quedaba una sola camiseta de la selección española en los comercios, la prenda se vistió en la intimidad. Las banderas, estarían aún más escondida dentro de los domicilios, no se veían en ningún balcón, demostrándonos, antes incluso de que se dieran algunos altercados protagonizados por jóvenes nacionalistas, que todavía no tenemos libertad. Bastaba entrar unos cientos de metros en la comunidad vecina de Cantabria para ver a muchos vascos que nunca hubieran osado dar muestras de estar con la selección engalanados de rojo y gualda. Y es que los que vivimos en una sociedad con nacionalistas conocemos el resultado final: todo debe parecer nacionalista. No se puede ser hincha de España, hay que callar y llevarlo en la intimidad. En esto reside el nacionalismo.

La selección nacional, que no es un concepto discutible sino material, como lo demostrara el pecho de Xabi Alonso o los tobillos de Iniesta, fue tratada por lo orangistas como si fuera la venganza por los desmanes de los Tercios de Flandes, y del atentado que sufriera el Príncipe de Orange, a manos de dos vascos que de forma espontánea decidieron, por el bien de la Cristiandad y del Emperador, darle un pistoletazo al líder hereje, lo que no le hizo demasiada gracia al propio Felipe II. Los vascos, en el Antiguo Régimen, éramos más españoles que el Emperador. Nuestro despiste sobre lo que somos empieza cuando viene la libertad, ante el liberalismo y después la modernidad. En el Antiguo Régimen los vascos no teníamos selección española, de la que hubiéramos sido los más fanáticos hinchas, pero sí milicias a las que alistarnos en defensa del rey nuestro señor, para acabar celebrando los alardes de Irún y Hondarrabia por las victorias contra los franceses, creándonos a posteriori el problema de no saber resolver democráticamente la participación de las señoras.

El contraste de lo que hacían los vasquitos fuera de aquí con el miedo que pasan dentro de aquí es lo que más me ha hecho reflexionar de toda esta juerga que ha sido el Mundial. Si la patria no es el lugar donde se nace -como dijera algún ilustrado de Cádiz- sino donde se es libre, es evidente que a los vasquitos con la camiseta roja que daban saltos por la victoria en Castro Urdiales les costará tener a Euskadi como patria.

Lo grave del caso es que aún teniendo un Gobierno constitucional y una Ertzaintza a sus órdenes no se haya ganado la sensación de libertad. Es el paso que queda, que el ciudadano pueda sentirse libre, y entonces Euskadi será su patria. Y entonces los nacionalistas tendrán que dejar a la gente llevar la camiseta de España por fuera. Pero entonces los nacionalistas dejarán de ser nacionalistas, porque no hay nacionalismo sin que ejerza su dominación. Un nacionalismo sin oprimir es otra cosa. "La patria no es el lugar donde se nace, sino donde se es libre", Martínez Marina.

Eduardo Uriarte, EL PAÍS, 20/7/2010

jueves, julio 29, 2010

Homenaje en Erandio


Hoy el Ayntamiento de Erandio, un pueblo de la margen derecha con estructura de margen izquierda, ha rendido un sentido homenaje a las víctimas del terrorismo nacionalista que venimos padeciendo en el paisito desde hace medio siglo.

En Erandio se han producido dos atentados mortales, uno en 1982 en el que mataron a Emilio Fernández Arias Un suboficial de marina natural de Piñeiro una aldea de A Fonsagrada en Lugo, llevaba 14 años residiendo en Erandio y tenía 2 hijos.

La audiencia nacional en 1984 condenó a Juan Carlos Echeandía Zorroza a 21 años de prisión por inducción al asesinato; fue el que, con 19 años, pasó a ETA la información para poder asesinar a Emilio.

El asesinato del niño Fabio Moreno Asla tuvo lugar el 7 de Noviembre de 1991. Una bomba colocada bajo el asiento del copiloto del coche familiar que era conducido por su padre el guardia civil Antonio Moremo Chica, le produjo la muerte y heridas a su padre y hermano cuando acudían a la piscina municipal.

Los asesinos Juan Carlos Iglesias Chouzas y Javier Martínez Izaguirre eran conocedores de que ese coche sólo lo usaban para trasladar a la familia.

Los anteriores datos proceden de Vidas rotas, historia de los hombres, mujeres y niños víctimas de ETA; un imprescindible libro de Rogelio Alonso, Florencio Domínguez y Marcos García Rey, editado por Espasa.

Un buen acto el de Erandio, salvo quizás por la nula implicación mostrada por los partidos políticos, que no fueron capaces de allegar ningún simpatizante a dicho acto. Es la primera vez que escucho el Agur jaunak en honor de una víctima del radicalismo nacionalista y me emocionó. Nos ganaron los periodistas.

El Correo, de donde copio la fotografía, da cumplida cuenta del acto.

Salud

martes, julio 27, 2010

Lizarra segunda parte

Cuando aún no se han apagado los rescoldos de aquel malhadado acuerdo de Lizarra (Estella para los no contaminados de la nomenclatura nacionalista) ya anda otra ve el PNV enredado nuevamente en lo mismo.

Informa El Correo de una reunión próxima del PNV con los restos de EA y HB (ETA al fin y al cabo) para buscar un acuerdo que les pueda llevar este verano a convocar marchas verdes, hay quien dice en la web si será verde de la hierba que se fuman o más bien verde picoleto, pero la cosa es que estamos otra vez en las mismas.

El PNV no escarmienta y, a pesar de perder el gobierno ,sigue entrando al trapo de una independencia que ni quiere ni le conviene, pero a la vez es incapaz de aceptar la legalidad tal como está configurada y no se resiste al canto de sirena del radicalismo nacionalista.

En fin, que se nos presenta una pre-campaña de las elecciones municipales y provinciales del año que viene, de lo más alegre y combativa, el PNV perderá votos en las ciudades pero los ganará entre los rústicos, lo que sin duda y dada la estructura de las elecciones provinciales, les favorecerá en las Juntas Generales.

País

lunes, julio 26, 2010

¿Bautizo civil?

Informaba ayer El Correo, cada vez es menos español ya que casi lo oculta en su mancheta, que en Muskiz (lo que viene a ser Somorrostro para los no iniciados en la toponimia inventada por el nacionalismo reinante) se ha producido el primer bautizo civil de Vizcaya.

En el mismo periodico escribe el admirado
Miguel González San Martín (les recomiendo su libro Pobeñeses) un artículo sobre el asunto, entre loa y crítica, muy interesante en sus comienzos si bien no concluye asumiendo los argumentos de partida.

Quiero quedarme con la acertada crítica inicial y hacer un llamamiento a quienes ven normal la anormalidad, a quienes viven en la permanente contradicción, a los instalados en el oxímoron perpetuo.

Una cosa es la boda civil que en sí es la anotación en el registro correspondiente de que fulanito se casa con menganita, o cualquiera de las otras posibles combinaciones que permite hoy la liberalidad de nuestra legislación, cambia de estado. Eso sí, siempre de dos en dos, no vayan a tomar el brazo cuando sólo les dan la mano; pues nuestros liberales legisladores no han llegado al trío aún.

Otra cosa bien distinta es que una autoridad civil, ya se sabe que los alcaldes están para todo y máxime en acercándose el período electoral, se preste a una ceremonia sin ningún sentido puesto que la inscripción de la bautizada en el preceptivo registro ya había tenido lugar en su día y los efectos de dicha inscripción obligan a las autoridades, a la sociedad, y a los progenitores a cuanto pudieron prometer en el simulacro de bautizo. Otra cosa es que además de otorgarle ciudadanía a su hija pretendieran darla de alta en la comandita del Sr. Alcalde que eso sí puede ser un bautizo aunque no estrictamente civil.

Salud

viernes, julio 16, 2010

Reincidir

Eso hago en este rincón, pero es que la ocasión lo merece. No quiero resistirme a traerles otro artículo de Roberto Blanco Valdes, que publica hoy en La Voz de Galicia. Viene a cuento del debate habido estos días en el Congreso y que tanto está dando que hablar la respuesta de Zapatero a Rosa Díez.

¡El capitán Zapatero al rescate!

El título de esta columna -y también el argumento- podría ser el de una película de aventuras o el de un cómic: Superman, Batman, El capitán Trueno al rescate!

¿Y qué pinta en medio de tal tropa el presidente del Gobierno?, dirán ustedes con razón. La cosa es fácil, aunque increíble: Zapatero ha entrado en el grupo de los rescatadores, no porque pretenda liberar a «la chica» de las garras del truhán o evitar una guerra planetaria robándole al maloso el arma secreta que él solo está dispuesto a devolver a cambio de un pastón. No; Zapatero lo que desea es rescatar los pocos preceptos del Estatuto catalán que han sido declarados inconstitucionales por quien legalmente puede hacerlo.

La cosa daría para una compleja disquisición jurídica con la que no voy a castigarlos, pero da también para un comentario de carácter general que a todos interesa. Porque, no contento con haber metido al país en el follón de una descabellada segunda descentralización que ha puesto patas arriba el estado autonómico español, Zapatero vuelve a mostrarse dispuesto a lo que sea con tal de no perder ni un voto en un caladero electoral -el catalán- del que han dependido sus dos victorias en elecciones generales.

Un presidente serio y responsable hubiera defendido el papel de las instituciones y, entre ellas, el del tribunal que ha apreciado, por cierto de manera harto generosa con la norma estatutaria y quienes la impulsaron, que algunas de sus previsiones son inconstitucionales.

En lugar de eso, el presidente desautoriza de plano al tribunal cuando promete meter por la puerta de atrás lo que aquel ha sacado por la puerta de delante, mientras su segundo, José Blanco, acusa al PP de ser, nada más ni nada menos, que «el mayor enemigo de Cataluña» por haber hecho uso de un derecho que le confiere nuestra ley fundamental (recurrir en inconstitucionalidad) y pese a saber que la sentencia del TC es la mejor prueba de que la presentación de tal recurso estaba justificada plenamente.

Y todo ello bajo la proclama, expresada ayer por Zapatero en el Congreso, de que «no podemos tapar la boca a los que se sienten una nación». ¿Quién les tapa la boca, presidente? ¿Cómo se puede ser tan demagogo e irresponsable cuando acaba de celebrarse en Barcelona una manifestación en la que cientos de miles de personas marcharon tras una pancarta que rezaba «Som una nació»? No, nadie impide a los catalanes que así lo sientan proclamarse una nación. Lo que se les impide, a ellos y a los demás nacionalistas, es lo que se le impide a cualquier particular, aquí y en todas partes: que, para satisfacer sus deseos, actúen como si la Constitución y las leyes no existiesen. De eso se trata, aunque sea una vergüenza tener que recordarlo.


El párrafo muestra con claridad el hastío que, cada vez más ciudadanos, sufrimos con este presidente del gobierno. Algo de eso le decía Rosa Díez en su réplica que pueden ver en esta dirección.

País

jueves, julio 15, 2010

Coches

Un total de 604 dice que tiene el gobierno de aquí, según informa El Correo.

Cuántos no tendrá el de Andalucía? y el de Cataluña? Sigan sumando hasta llegar a La Rioja y luego piensen si el famoso Parque Móvil de los Ministerios se ha reducido en igual proporción.

Dado que la mayoría de esos coches tienen chófer, mecánico y, lo que aún es más caro, ocupante, estamos hablando de un costo inasumible por un país rico, no digamos ya si somos pobres y estamos en crisis.

Debiera haber ya políticos (sin coche por favor) que estuvieran planificando un adelgazamiento imprescindible de todas las administraciones; también de muchos ayuntamientos minúsculos en los que no tiene sentido mantener un funcionariado similar a los mayores.

A todo esto súmenle que aquí en el paisito las diputaciones mantienen sus órganos ejecutivos y legislativos a pleno rendimiento, bueno tras el desalojo del PNV del gobierno vasco y la consiguiente recolocación de políticos en la administración local y foral, bien se puede decir que el rendimiento de las diputaciones se acerca al 200%

Quizás esto aún no sea Grecia, pero a nada que le demos tiempo les sobrepasamos.

País

miércoles, julio 14, 2010

La emergencia de la nación sumergida

Publica hoy en La voz de Galicia Roberto Blanco Valdés un artículo que me parece necesario y del que quiero dejar constancia aquí en el rincón.

Como el Nautilus del capitán Nemo, también la nación española ha vivido sumergida, sin casi atreverse a salir a la superficie, durante las últimas tres décadas. De hecho, su silencio era, si cabe aún, más llamativo a la vista de las expresiones públicas constantes de nacionalidades y regiones. Y es que desde que se inició la transición, y ante el empuje de las reivindicaciones nacionalistas o regionalistas que se fueron extendiendo por doquier, la de España como nación que acoge a todos pareció pasar a mejor vida. Podría decirse de un modo claro aunque, aparentemente, paradójico: desde 1978, las expresiones de la nación española han brillado por su ausencia.

Lo que ha habido aquí han sido, primero, Días da Patria Galega (O Días de Galicia) y Diadas y Aberri Egunas; y, más tarde, Días de Andalucía, Murcia o Aragón, junto (no frente, sino junto) a los cuales la oferta nacional española era, admitámoslo, poco sugestiva: Días de las Fuerzas Armadas, institución que no suele levantar grandes pasiones en parte alguna del planeta; y Días de la Constitución, documento que solo las levanta en algunos lugares, como Estados Unidos, donde la gesta constitucional aparece inextricablemente unida a la construcción del Estado nacional.

Por eso, lo que ha ocurrido en España entre el domingo pasado y este lunes resulta un punto y aparte y pone de relieve que, con la renovación generacional, algo había nacido en España aunque no hubiera tenido todavía la ocasión de mostrarse para que lo viera, literalmente, todo el mundo.

El domingo en el conjunto de España, y el lunes en Madrid, varios millones de personas de todas las edades, aunque mayoritariamente jóvenes, llenaron las plazas de pueblos y ciudades para manifestar su alegría porque la selección española de fútbol ganase para ellas un mundial. Lo han hecho agitando docenas de miles de banderas españolas y gritando «¡Viva España!» y «¡Viva la roja!» en una muestra de unidad que solo sorprende por lo históricamente inusual. Lo mismo hubiera ocurrido en Paraguay, en Brasil, en Holanda o en Alemania, pero allí, al contrario que aquí, a nadie le habría llamado la atención.

Por eso hay que destacarlo: porque hay una generación entera que no tiene ya vergüenza o prejuicio alguno en expresarse como española y en agitar algunos de los símbolos comunes. Una generación que considera que ese sentimiento es compatible, sin la más mínima contradicción, con otras pasiones o amores regionales o locales. Una generación, en fin, que, por fortuna, y eso es sin duda lo mejor, no reivindican a España contra nadie, lo que demuestra una modernidad y generosidad de la que carecen, en general, y por desgracia para todos, nuestros nacionalismos interiores.

Salud

sábado, julio 10, 2010

¡Viva la Constitución!

Hoy a las 12:30 ante la sede del Tribunal Constitucional UPyD ha convocado una concentración a la que no podré acudir pero les invito a que vayan cuantos puedan.

Tendrá lugar la lectura del siquiente manifiesto, al que no le he encontrado ninguna pega, salvo quizá su tamaño para leerlo en un blog. Hagan el esfuero de leerlo que creo que desde hace muchos años no se publicó nada con tanta enjundia

MANIFIESTO EN DEFENSA DEL ORDEN CONSTITUCIONAL

La principal diferencia entre la democracia y cualquier otro sistema político es que la primera se funda en un orden constitucional que garantiza a los ciudadanos sus libertades básicas y su igualdad ante las leyes. La Constitución es la clave de bóveda del edificio legislativo que desarrolla y ordena derechos y obligaciones que deben ser iguales para todos. Por eso atacar la Constitución vaciándola de contenido y debilitando su carácter de ley de leyes, es atacar la libertad, la igualdad y la propia democracia.

En estos últimos años los ciudadanos españoles estamos padeciendo una erosión constante de nuestro orden constitucional, y por tanto de nuestras libertades y de nuestra igualdad ante la ley. Nada hay más frágil que la democracia, cuyo mantenimiento y mejora exige de todos una vigilancia constante y comprometida. Resulta intolerable que los propios gobernantes elegidos para defender el orden constitucional sean quienes más empeño ponen en convertirlo en un caos sin sentido.

Hoy nos hemos reunido aquí, ante la sede del Tribunal Constitucional, para expresar nuestra protesta contra la manipulación de las instituciones encargadas de velar por el mantenimiento del orden constitucional, o lo que es lo mismo, de velar por los derechos y obligaciones iguales para todos, y por nuestra libertad personal. Nos hemos reunido aquí, ante la sede del más Alto Tribunal, para proclamar que sin justicia constitucional, no hay democracia.

La unidad de la Nación española que proclama nuestra Constitución no es otra cosa que la igualdad jurídica de todos nosotros tomados de uno en uno, como sujetos libres y miembros conscientes de la misma democracia. Y esta es, ciertamente, la unidad que pone en peligro la negación del orden constitucional a través de leyes y de acciones de gobierno que no nos consideran ciudadanos de la misma Nación sino que, imponiendo obligaciones y deberes diferentes, convirtiendo privilegios en falsos derechos y arbitrariedades en falsas obligaciones, nos dividen en rebaños enfrentados donde lo que importa no es la libertad y la igualdad entre ciudadanos personalmente diferentes, sino la identificación cerril con un pensamiento obligatorio y uniforme que llaman, sin serlo, “identidad cultural”.

Con la excusa de contentar a nacionalistas descontentos por definición, de potenciar disparatados derechos de lenguas y territorios a base de restarlos a las personas, de reparar viejas heridas sentimentales y resucitados agravios históricos, de imponernos por nuestro presunto bien leyes sectarias que casi nadie reclama, los partidos que gobiernan España y numerosas comunidades autónomas protagonizan constantes ataques contra la Constitución. Sus esfuerzos por controlar y manipular la justicia, la hacienda, los medios de comunicación y todas las demás instituciones públicas para ponerlas al servicio de sus intereses particulares, su contumacia en tomar decisiones claramente inconstitucionales, nos han conducido a una gravísima crisis política.

Naturalmente, la Constitución puede cambiarse para mejorar la democracia. Nosotros proponemos una reforma constitucional que mejore nuestro orden político a la luz de las experiencias de todos estos años. No somos partidarios de la inmovilidad o la fosilización de nuestra Constitución, sino de adecuarla a los retos del siglo XXI. Pero cualquier reforma que se proponga debe ser fiel y leal al orden constitucional, seguir los procedimientos establecidos por la propia Constitución para su reforma. Y lo que rechazamos es la práctica viciosa de cambiar la Constitución por la puerta de atrás, mediante reformas de Estatutos de Autonomía o por medio de leyes y decretos que chocan con su letra y su sentido. Como ciudadanos españoles, libres e iguales, exigimos ser consultados por quienes quieren cambiar la Constitución por la vía de los hechos consumados, burlando el “derecho a decidir” básico de la democracia, el de participar en la toma de decisiones sobre lo que nos afecta a todos y no sólo a una parte de nuestro país.

Cuando el orden constitucional está en peligro, también lo está la libertad de todos y cada uno de nosotros. Es el momento de que los ciudadanos conscientes digamos de nuevo basta ya, como muchos miles dijeron no hace tanto frente al terrorismo y al nacionalismo obligatorio en el País Vasco. Es el momento de exigir el cese de todo ataque contra la Constitución, y el fin del desacato de los gobiernos a las leyes y sentencias que no les gustan.

Como ciudadanos que cumplimos las leyes y acatamos las sentencias de los tribunales de justicia, incluso las que no compartimos, exigimos a los gobernantes, comenzando por el Gobierno de la Nación, que también ellos respeten la legalidad y cumplan y hagan cumplir las sentencias de los tribunales, incluyendo la de este Tribunal Constitucional relativa al Estatuto de Cataluña. Porque un país donde los gobernantes se reservan cumplir o no la legalidad a su conveniencia no es un Estado de derecho, sino el reino de la arbitrariedad. Porque sin justicia constitucional, no hay democracia.

No denunciamos ataques abstractos. Mientras hoy nos concentramos ante el Tribunal Constitucional para defender la Constitución y protestar contra quienes la quieren vaciar de contenido, en Barcelona se celebra una manifestación contra la Constitución convocada expresamente por el presidente de la Generalitat; una convocatoria basada en las falacias de que la voluntad del pueblo y la nacionalidad sentimental están por encima del Estado de derecho y de la nación constitucional. Con independencia de la opinión que cada cual tenga de los conflictos políticos y jurídicos creados por la irresponsable gestación de un Estatuto de Autonomía claramente inconstitucional --conflictos artificiales de los que el Presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, es el máximo responsable--, la manifestación de Barcelona representa un ataque a la Constitución, y es un acto de desacato al orden constitucional que adquiere su máxima gravedad al estar liderado por el Gobierno y las instituciones de Cataluña. Es una manifestación contra la separación de poderes y la autonomía de la justicia, contra la igualdad de los ciudadanos y contra el imperio de las leyes mientras sigan vigentes. En definitiva, es una manifestación contra la democracia.

Nosotros exigimos a la Generalitat de Cataluña que cumpla con su obligación democrática de acatar la sentencia del Tribunal Constitucional; y exigimos al Gobierno de la Nación que haga cumplir la sentencia y promueva la derogación de todas las leyes que se han aprobado en desarrollo de artículos declarados inconstitucionales por el fallo del TC. Exigimos que cualquier solución a las deficiencias de la actual estructura territorial del Estado se discutan con transparencia en el Parlamento Nacional, con argumentos y propuestas políticas, impidiendo que el futuro de España, nuestro futuro, sea objeto de oscuros trapicheos celebrados a nuestras espaldas.

El objetivo de la política democrática no es hacer que unos se sientan más cómodos que otros a base de imponernos a todos sus sentimientos, haciéndolos obligatorios; el objetivo de la democracia no es restañar heridas imaginarias ni ganar retroactivamente guerras del pasado. El objetivo de la Constitución no es dar satisfacción a mitos y emociones que, por muy comprensibles y humanas que sean, van contra los principios de solidaridad, libertad e igualdad sin los cuales no hay democracia ni ciudadanía, sólo tribus enfrentadas y encadenadas a emociones primarias.

La política democrática debe perseguir el perfeccionamiento incesante de las instituciones, trabajar por un gobierno más eficaz y transparente, por un parlamento más representativo y reflexivo, por una justicia más autónoma y justa. La democracia es la consecución de más libertad personal y de más igualdad entre los ciudadanos con independencia de cuál sea su riqueza, su lugar de nacimiento o residencia, su profesión, su lengua materna, su sexualidad, sus creencias y sentimientos de identidad o pertenencia. Libertad e igualdad son los valores supremos que debe preservar y cultivar el orden constitucional de la democracia, y estos son precisamente los valores que están poniendo en grave peligro los ataques contra el orden constitucional de la España democrática que hoy hemos venido a defender.

Ciudadanos, nuestra libertad está amenazada por quienes creen que pueden dividirnos para acabar con la igualdad y la solidaridad entre nosotros, levantando fronteras artificiosas en nombre de mitos y prejuicios que encubren turbios intereses e impiden la regeneración de la política democrática.

Ciudadanos, ¡Basta ya de ataques a la democracia!
Ciudadanos, ¡Viva la Constitución!

viernes, julio 09, 2010

Vuelta al origen

Que el paisito lo quiere convertir el nacionalismo en su corralito ya lo sabemos de siempre, pero nunca ha estado tan patente como ahora que se descubre que cuando Ibarretxe se dedicaba a propagar proyectos de secesión, parece ser que el Consejero Balza (hoy otro prohombre nacionalista en el equipo de Sánchez en Iberdrola) dedicaba efectivos de la policía a investigar, por cuenta del PNV alavés, a cuanto se movía en esa provincia y era posible chantajearlo para la causa nacionalista o personal de los miembros del PNV ahora encausados.

Todo este desbarajuste, del que da cuenta en un amplio reportaje El Correo, es parte desmembrada de otro proceso mayor por el que destacados miembros del PNV en la diputación alavesa se estaban montando una red de extorsión a empresas contratistas de la Excma. Diputación.

Se da el caso, y parece ser que aún no se ha investigado sobre ello, que estos mismos señores eran los que, mediante una sociedad interpuesta, se dedicaban a comprar o alquilar los locales que luego eran cedidos al PNV en la provincia. Lo tendrán que decir los tribunales pero la cosa se parece al dicho de blanco y en botella y el PNV tiene montada una red de cobro de impuestos especiales a los contratistas y, a la vista del espionaje, a toda la sociedad alavesa.

En el origen la ertzaintza había sido la policía del PNV, y por lo visto siguen sin pensar que el paisito es de todos y las instituciones las sufragamos todos.

País

lunes, julio 05, 2010

Siempre viernes


Desde hace ya 5 días, aunque en la actividad del blog no se haya notado, para mi, es siempre viernes por la tarde. Después de unos 36 años madrugando, finalmente me he podido plantar. Se acabó.

Quizás a alguno le parezca poco, pero a este servidor los últimos tiempos se le hicieron largos por desmotivadores. No es este el lugar para buscar excusas, puede que la primera sean los años, si bien una dirección alocada y únicamente pagada de sí misma, hizo que a muchos se nos hiciera más difícil el trabajo a pesar de que no estaba del todo mal pagado.

El despedirme me sirvió también para comprobar la estima de muchos compañeros que tuvieron el coraje de dedicarme una de sus escasas tardes de viernes además de obsequiarme con la “biblioteca” de la imagen; gracias Cris, Tano, Iñaki, Jone, Luciano, Olga, Merche, José Luis, Isabel, Bego, Mariano, Juan, Adolfo, Javier, Paco, Ramón, Ana y Quino.


En fin, en adelante me podré dedicar a leer los blogs amigos con más detenimiento y espero que me queden ánimos para participar más asiduamente.

Salud