viernes, septiembre 07, 2007

Pisos y especulación pública

A raíz del anuncio de la futura ley que garantiza el acceso a una vivienda en la Comunidad Autónoma de Andalucía, se ha montado un ligero revuelo en las páginas de los blogues en Sopelana.

La mayoría hemos recibido con cierto alborozo y, por qué no decirlo, con envidia sana el citado anteproyecto. Erikenea se lo tomó por el lado malo, quizá su reciente paso por la administración local le hizo aflorar un poco la mala conciencia.

Le envié un comentario a su blog, que no lo quiso reproducir y, a cambio, cita partes de mi escrito en una nueva exposición.

Entre lo que se calla está mi referencia a que en el Ayuntamiento de Sopelana, del que formó parte en la oposición y en el gobierno, sistemáticamenten, desde el principio de la democracia, se ha vendido el aprovechamiento público del suelo, ese diez por ciento que cedían por ley los constructores, a los mismos constructores especulando así con un bien público y muy escaso.

Tal vez la futura ley andaluza no sea la panacea y cueste años hacer realidad su deseo, pero, bien mirado, no deja de ser de justicia que, un estado que garantiza la educación universal, la sanidad universal y unos ingresos mínimos personales, deba también garantizar una vivienda asequible a los ciudadanos.

No estamos hablando de regalar nada, el que una familia dedique un euro de cada tres que gana a adquirir una vivienda, es un esfuerzo considerable cuando no se ganan millones.

Escribe Rafaele Simone, en el número 174 de Claves, un artículo, del que pienso ocuparme más ampliamente en otra ocasión, titulado ¿EL MUNDO ES DE DERECHAS? y resalta que, la sociedad dirigida por el “Monstruo Benévolo” en paralelo a lo que dice Tocqueville en Democracia en América, se dedica a promover el furor por ocupar el tiempo libre “con noches blancas inútiles, torbellinos de diversiones y consumo, conciertos, festivales, eventos y manifestaciones que son promovidas por toda Europa por parte de los poderes públicos, aunque dejen exhaustas a las ciudades, agoten a los ciudadanos y vacíen las arcas de las administraciones”.

Un sistema que produce más viviendas que medio Europa junta y que la mayoría de los necesitados de vivienda no pueden acceder a una, es manifiestamente mejorable y no va a ser la “mano ciega” la que lo corrija si ella fue la que lo provocó en los últimos treinta años.

Pasando de lo global a lo local, tan querido por los nacionalistas, algo habrá pasado con esas casi mil viviendas previstas en Sopelana cuando, una empresa bien conocida por nuestros gestores locales, se apresuró a comprar el suelo hace casi 10 años y comunicar al Ayuntamiento el inicio de los trámites de reparcelación sin que se hayan tenido más noticias de ello a la fecha, salvo rumores de que están negociando un mayor aprovechamiento.

Salud

1 comentario:

Anónimo dijo...

http://www.jmlage.net/blog/derecho-a-la-vivenda-en-andalucia-05-09-2007/