Atrasados

Así andan los nacionalistas no violentos estos días. Publican hoy en su órgano de prensa (seguimos en el paisito como hace cien años, con periódicos de partido y con quien los defiende), que han iniciado la segunda transición.

Quienes mantienen un programa del siglo XIX en el XXI pretenden hacer la segunda transición cuando no se han enterado de la única que se puede hacer. Una será, o no, posible, la segunda es imposible, pues o ya se hizo o es la primera.

Hace más de una década Aznar también anunció su segunda transición, fue lo que fue y así nos encontramos ahora.

La transición fue el paso de un régimen autoritario a un sistema democrático, en ella convinimos los españoles en una seria de asuntos que nos llevaron a disfrutar de una constitución por primera vez hecha para todos, no de unos contra los otros. El PNV participó entonces y están sus puntos de vista ampliamente recogidos en ella. Luego decidió no rubricarla, pero ello no le da derecho a pensar que treinta años no es nada, que siempre podemos volver al comienzo.

Es esa una postura infantil, pensar que el mundo está en un perenne comienzo lleva a los políticos a equivocarse gravemente. La democracia es una seríe de acuerdos que no se pueden rediscutir diariamente. No es posible comenzar la historia cada día. Quizá piensen los nacionalistas, que inventan diariamente la historia, que no sólo se puede inventar, sino que incluso se puede reiniciar, mas ello no es posible.

La transición fue una época, quizá gloriosa quizá realista, pero no puede reformularse diariamente. Existió y ahora nos toca ir mejorando, con el mayor acuerdo posible, lo que entonces se inició, pero no es posible otro comienzo, no es el momento de plantear un borrón y cuenta nueva cuando llevamos treinta años de cuentas, muchas incontables.

País

Pie defoto: Tomada de DEIA. Muestra a los burukides en las nubes, alejados de la realidad de los paisanos de Baracaldo. quienes, como todos, nos encontramos más preocupados por soluciones que por transiciones.