Imposiciones

Dice EA que “este pueblo” ¿se referirá a Sopelana? no va a estar sujeto a imposiciones.

Tienen estos señores una concepción muy especial de las imposiciones. Básicamente entienden por imposición no poder hacer, en cada momento, lo que le da la real gana.

Mal vamos.

Leía hoy en la revista vasca de la cultura y las ideas “Cuadernos de Alzate”, que ya va por el número 38 desde su aparición en 1985, un artículo de Joseba Arregi en el que bajo el título de “Desastre u oportunidad” analiza el argumentario nacionalista desarrollado en torno al plan Ibarretxe y especialmente a la ley de consulta derogada por los tribunales competentes. Copio un párrafo que describe gráficamente la sinrazón de EA en este caso.

....del argumentario nacionalista citado se deduce que el nacionalismo vasco no ha interiorizado lo que implica la cultura constitucionalista. En dicha cultura el sometimiento de la voluntad soberana al derecho y a la ley es el único y exclusivo camino al Estado de derecho, a la política democrática. Pero para el nacionalismo vasco lo importante es la voluntad subjetiva, la voluntad popular, el sentimiento, la identidad. Todo lo demás es secundario y debe ceder ante la prevalencia de la voluntad colectiva, del sentimiento. No hay ley que se pueda imponer a un sentimiento. Es el sentimiento el que debe ser recogido en el sistema legal y jurídico. Pero así desaparece la política democrática entendida como el espacio de reglas y normas que regulan la negociación entre diferentes sentimientos y voluntades particulares.

Si a esto se añade la “boutade” de Egibar que cree que “la política es el arte de hacer posible lo imposible”, apañados vamos.

Con estas carencias democráticas nos están gobernando estos señores.

¿Es posible que todo un consejero de justicia sea a la vez el responsable político de un partido que trata de tal modo la legalidad vigente?

Pues sí, en el país de las maravillas, ya saben, donde las palabras significan lo que quiere el que manda, todo eso es posible.

En el paisito es posible llamar a la desobediencia civil desde el coche oficial o desde el consejo de gobierno.

Eso sí, el político de EA no sabe ni cómo ni cuándo irá a buscar el amparo, que no podrá obtener, del TEDH.

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