miércoles, abril 15, 2009

El gobierno de los negros

Tras tanto manosear, desde antes de la campaña, la imagen de Obama como primer presidente negro de USA, llegando incluso a mimetizar su imagen en los carteles del PNV, nos encontramos ahora con la realidad de que en el paisito van a gobernar “los negros” y eso no pueden tolerarlo los nacionalistas.

Cada uno a su manera, unos mediante huelgas increíbles, otros con amenazas de no dejarles ni un respiro, y los demás directamente amenazando con matarles.

Escribe hoy en El Correo un artículo, con el título que he copiado, José María Calleja en el que dice entre otras grandes verdades lo que les copio por si no sienten curiosidad por leer el artículo completo:

Hablan los enfurecidos dirigentes del PNV de «franquistas», de «José Antonio», de «zarzuela española», emplean una terminología xenófoba, artillada en una maniobra que resulta patética por deslegitimar los resultados electorales que han permitido conformar una mayoría distinta en el Parlamento vasco después de treinta años de monocultivo del PNV.

Hay también en el mismo periódico otro artículo de un pensador muy distinto pero que coincide en lo fundamental.

Kepa Aulestia, ex dirigente de EE y ahora en labores de analista político, bajo el título de “
La lealtad del nacionalismo”, nos informa del escaso respeto nacionalista por el imperio de la ley.


El PNV ha llamado a la izquierda abertzale a cortar amarras respecto a ETA, pero nunca la ha emplazado públicamente para que se avenga a acatar la legalidad establecida por la ley de partidos, siquiera formalmente. Es decir, el PNV siempre ha sido consciente del vínculo de dependencia que existe entre la banda terrorista y la trama de organizaciones que le han dado amparo público, pero no ha querido asumir que tal estado de cosas resulta intolerable para cualquier sistema democrático. Si el PNV demanda la legalización de la izquierda abertzale, a pesar de que ésta no se distancie de ETA, da por buena la persistencia del reparto de papeles entre la rama militar y la política que tanto ha contribuido a la perpetuación del terrorismo. Porque resulta democráticamente imposible constatar que ese reparto existe y, a la vez, exigir que pueda contar con representación en las instituciones.

….. la suma de los votos cosechados por PNV, Aralar, EA, más los anulados con la papeleta de D3M, representa un porcentaje mayor que los votos constitucionalistas. Pero si dicha suma no ha prevalecido es porque una parte del nacionalismo vasco juega al margen y contra las normas democráticas, que son las que hacen posible la convivencia entre diferentes en Euskadi.

El primer efecto positivo de las pasadas elecciones es que por primera vez el Parlamento Vasco ha condenado unánimemente a ETA. Para eso han sido necesarios 30 años de democracia trufados en el paisito de largos silencios-

Salud

1 comentario:

J. Rogelio Rodríguez dijo...

Debemos seguir en la denuncia continua de aquello, de "aquéllos" más bien, que quieren hacer "normal" lo que es completamente anormal.

El artículo de hoy, excelente. No se puede ser más conceptista ("Lo bueno, si breve, dos veces bueno").

Un cordial saludo.