El común de los mortales vimos cambios claros, otras formas, otros discursos en la reacción del lehendakari Patxi López con respecto a Ibarretxe, y no digamos nada de cuando los años negros de Garaikoetxea que sacaba comunicados en contra de las detenciones de etarras y de las primeras extradiciones de Francia a España.
El Sr. Urkullu nos asegura ahora que no es eso, que siempre ha sido todo igual. Niega incluso a Lampedusa. Nada ha cambiado.
Lo que no parece que explica el dirigente nacionalista es a qué venía entonces toda la sarta de amenazas y el rebote que se pilló y dejó escrito en su blog personal.
Cosas que tiene el hacer un discurso a base de encuestas. Ahora toca negar la mayor porque la gente distingue claramente el discurso del lehendakari de aquellos “pucheros” que escenificaba el Sr. Ibarretxe.
Pena de país
El Sr. Urkullu nos asegura ahora que no es eso, que siempre ha sido todo igual. Niega incluso a Lampedusa. Nada ha cambiado.
Lo que no parece que explica el dirigente nacionalista es a qué venía entonces toda la sarta de amenazas y el rebote que se pilló y dejó escrito en su blog personal.
Cosas que tiene el hacer un discurso a base de encuestas. Ahora toca negar la mayor porque la gente distingue claramente el discurso del lehendakari de aquellos “pucheros” que escenificaba el Sr. Ibarretxe.
Pena de país
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